PARA DESCUBRIR Y DEJARSE DESCUBRIR

Ubicada en la costa de la Mar de Ansenuza, en el noreste de la provincia de Córdoba, Playa Grande vuelve a ofrecer su encanto. En las redes de la historia quedaron grabados los días en que este pueblo era un centro turístico reconocido.
Pero hoy, muchos años después de que la laguna se llevara su esplendor, este lugar vuelve a amigarse con esa compañera inseparable para dejar descubrir las maravillas de la naturaleza.
Aquí los silencios están llenos del canto de los pájaros, del sonido de las olas diluyéndose en la playa de arena y del viento meciendo los árboles o silbando entre las chapas de cinc de los tejados.

La mar nos ofrece una faz diferente cada día, cada parte del día, cada hora, cada momento. Podemos abarcar el horizonte con nuestra vista y, al paisaje cambiante de la laguna, se une el del cielo, igualmente diverso y bellísimo, atravesado por gaviotas, garzas, cisnes y flamencos - entre otras aves- que le imprimen, en su vuelo, pinceladas rosadas o blancas que deleitan el alma.

Las estrellas parecen atrapar nuestras cabezas y las noches de luna son un regalo inigualable.
Todos los días -los de sol, los seminublados,los nublados, los de lluvia- son hermosos aquí.
Este es un lugar en el que Dios manifiesta abiertamente su grandeza y su energía.

Nuestro deseo es que cada día, más gente pueda vivenciarla. Por eso es que abrimos este espacio, para que quienes no la conocen encuentre un nuevo lugar posible y para que quienes ya la descubrienos registren aquí su impresión del lugar.

BIENVENIDOS